08/03/2021
Nadia Ferrari

El primer Día de la Mujer con aborto legal en Argentina

Por Mariana Iglesias, para Clarín

Después de meses de debate, la Interrupción Voluntaria del Embarazo es ley. Se multiplicaron las consultas en hospitales y centros de salud.

Por Mariana Iglesias para Clarín

Es el primer Día Internacional de la Mujer con aborto legal en Argentina. Un año atrás, en la movilización por el #8M, era uno de los principales reclamos, junto a la igualdad de géneros y el fin de la violencia machista. Un paso enorme, y la concreción de un derecho pedido desde hace décadas en el país.

La ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), votada en la madrugada del 30 de diciembre tras meses de debate, permite el aborto hasta la semana 14 inclusive. Luego, la interrupción debe ser por causales: violación, riesgo de vida, problemas de salud.

Por la ley, las consultas al 0800 222 3444 de la Dirección Nacional de Salud Sexual y Reproductiva se multiplicaron. Lo mismo los mensajes al mail del ministerio: saludsexual@msal.gov.ar. También se puede denunciar si un centro de salud niega la atención. La ley 27.610 entró en vigencia el 24 de enero. Aún falta su reglamentación.

“Esta ley empieza a saldar una deuda con las mujeres. Garantiza el ejercicio de las decisiones que afectan nuestra sexualidad, salud, y vida. La ley trabaja en remover el estigma y los prejuicios y en dar un espacio para que podamos decidir si continuar o no un embarazo según la propia evaluación”, explica a Clarín Mariana Romero, médica, integrante del Cedes y Redaas.

Desde la Campaña Nacional por el Aborto Legal Seguro y Gratuito se repetía que era la deuda de la democracia, y estimaban en más de 3000 las muertas por complicaciones en abortos clandestinos desde 1983. La mayoría, mujeres sin recursos para pagar intervenciones privadas.

La ilegalidad y las trabas para acceder a la Interrupción Legal del Embarazo (ILE) han llevado a que Argentina tenga altas tasas de embarazos en la adolescencia: el 13% de los 700 mil bebés que nacen por año son de menores de 20 años (el 70% no intencionales) y unos 2.400 bebés de niñas menores de 15 años. Los embarazos de la enorme mayoría de estas niñas son producto de abusos.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, “las complicaciones asociadas al embarazo y los abortos en condiciones de riesgo son las causas principales de muerte entre adolescentes de 15 a 19 años». Las adolescentes con riesgo y las niñas abusadas siempre han tenido el derecho a interrumpir sus embarazos, pero no en todos los casos se los han permitido. El aborto legal viene a saldar esa deuda también.

“Es el 8 de Marzo menos pensado, pero más imaginado desde hace décadas por todes quienes activaron históricamente para que el aborto sea ley y el derecho penal salga un poco de nuestras camas. Es una conquista increíble la de ganar un derecho, y especialmente este reconoce el deseo y la libertad sexual como prerrogativas que tienen el horizonte un embarazo, pero al mismo tiempo que eso no obliga a nadie a maternar”, dice a Clarin Soledad Deza, abogada, al frente de la Fundación Mujeres por Mujeres.

Deza enumera desafíos, como «el uso espurio de la Objeción de Conciencia en el campo de la salud, o la judicialización conservadora dentro del patriarcado judicial». Y «la implementación para el pleno acceso. Las políticas públicas son la clave: información, mucha difusión de derechos, mucha alfabetización jurídica para que ningune se quede sin saber que tiene derecho a abortar y mucho recurso humano en todos los niveles de atención dispuesto a garantizar la prestación».

La abogada feminista integra el Consejo Asesor de la Dirección de Salud Sexual: «Observo un Estado comprometido con la implementación de la ley y dispuesto a los esfuerzos más fuertes, que son asegurar que la objeción de conciencia personal no se desgobierne. Sobre todo en las provincias más conservadoras, donde se confunde autonomía provincial con patente de corso para violar la ley”.

“A mayor información, menos abortos tardíos y por ende menos resistencias. La Educación Sexual Integral es clave. Es desde la Escuela donde hay que aprender que la Maternidad será deseada o no será”.

Gabriela Luchetti -ex Jefa de Ginecología del Hospital de Neuquén Castro Rendon, hoy a cargo de la cátedra de Ginecología y Obstetricia de la Universidad Nacional del Comahue-. asegura que “el aborto nunca se enseñó, siempre fue un contenido estigmatizado. Se hablaba sólo de lo anatómico y fisiológico sin atender la salud integral, y eso que el aborto siempre fue la principal causa de egresos hospitalarios de ginecología».

«El 44% de los embarazos son no planificados, una de cada 5 mujeres tiene un aborto, la prevalencia es altísima -afirma la médica-. La ley ayuda para que se enseñe en las universidades y facilite el trabajo en los hospitales. Las obras sociales y prepagas deberían tener ya la IVE en sus cartillas».